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¿Por qué es importante aplicar estrategias y herramientas de gestión del tiempo como traductora?

A priori puede parecer una tontería, pero contabilizar el tiempo de tu jornada laboral puede ayudarte mucho más de lo que te imaginas. El uso de herramientas y estrategias de gestión de tiempo puede darte información valiosa a la hora de hacer un presupuesto: es imprescindible para definir tus tarifas y tus plazos, pero, sobre todo, también es útil para organizarte mejor y ser mucho más productiva.

 

¿Por qué es importante la gestión del tiempo?

Es bastante obvio que la gestión del tiempo es fundamental para rendir al máximo en tu trabajo, pero revisar la hora a la que empiezas y a la que acabas para después repasar cuánto tiempo has estado delante del ordenador no es suficiente. Tener la capacidad de medir el tiempo que tardas en hacer tareas específicas, además de ayudarte a organizar mejor tu vida, también conlleva otros beneficios que te harán mejorar como profesional: serás más consciente de cómo trabajas y cómo empleas el tiempo.

 

Algunos de los beneficios de la gestión del tiempo son:

  • Organizarse mejor
  • Ser más productiva
  • Distinguir qué tipo de trabajos son más rentables
  • Ser más precisa con tus clientes en cuanto a tus plazos o, incluso, saber si un encargo con un plazo apretado es o no factible
  • Ofrecer tarifas más realistas basándote en información objetiva

 

¿Cómo mejorar la gestión del tiempo?

La gestión del tiempo es algo que depende mucho de cada persona: su capacidad de concentración, sus preferencias en el método de trabajo, las herramientas de las que dispone, etcétera. Primero tendremos que ser conscientes tanto de nuestra situación mental como de los horarios que fijamos para trabajar. Por ejemplo, hay gente que es más productiva por la tarde que por la mañana, o que tiene mayor facilidad para las tareas creativas a primera hora. Si tienes la oportunidad de elegir tu horario, registrar tus tiempos también te dará información sobre cómo configurar tu jornada laboral. 

 

Pero, ¿cómo se puede mejorar la gestión del tiempo en el trabajo? A nosotras, lo que mejor nos ha ido ha sido implementar herramientas y técnicas de gestión del tiempo de forma paulatina en nuestra rutina (rima y todo), pero el primer paso hacia la mejora es tomar consciencia de lo que hacemos y, como ya hemos dicho, de nuestro método de trabajo, nuestras preferencias y de cómo funciona nuestra cabecita durante una jornada laboral. Para ello, lo ideal es empezar por hacer un listado de las tareas que hacemos normalmente. Por ejemplo: hacer un presupuesto, transcribir en español, transcribir en inglés, leer y contestar emails, traducir en una combinación u otra, revisar, etcétera. Y, a partir de ahí, ver qué es lo que nos da más pereza, lo que hacemos más y lo que creemos que hacemos más rápido para que cuando implementemos las técnicas y herramientas podamos hacerlo de la forma más beneficiosa.

 

Mejores herramientas y técnicas de gestión del tiempo

Probablemente te estés preguntando por qué aún no hemos dicho qué herramientas y técnicas de gestión de tiempo son las mejores: pues porque lo vamos a decir en este apartado. Aquí te recomendaremos algunas de las herramientas y técnicas que más nos gustan y que más te pueden ayudar a gestionar el tiempo:

Captura de pantalla del programa Manic Timer en el que sale una lista con programas y al lado el porcentaje de tiempo que los has utilizado.

Utiliza aplicaciones de time tracking

La forma más eficaz de saber cuánto tiempo empleas en cada tarea es utilizando una aplicación de time tracking. Hay muchísimas gratuitas como Toggl, Clockify o Everhour, que te permiten organizarte por tareas (esa lista de la que hemos hablado antes) y que son muy fáciles de usar, así que no sirve la excusa de “llevarte mal con la tecnología”, estamos en 2022… ¿Tú sabes cuánto tardarías apuntando todo en un papel o en un Excel? ¡Mejor que lo haga una app! Además, semanalmente la aplicación te manda un correo con un resumen de las horas trabajadas y el tiempo invertido en cada tarea.

 

También es muy útil ManicTimer, una aplicación que registra absolutamente todo lo que haces en tu ordenador, desde saber exactamente cuánto rato has utilizado cada aplicación hasta qué documento concreto estabas visualizando en cada momento.

Para organizar las tareas usa la técnica de “urgente-importante” 

Si eres de las que se distrae hasta con una mosca o simplemente quieres utilizar alguna técnica para ser más productiva, la más sencilla es la matriz de Eisenhower (suena más complicado de lo que realmente es). Esta técnica se basa en clasificar las tareas en “urgentes” o “no urgentes” e “importantes” o “no importantes”. Haces una lista de tus tareas, pones a cada una las etiquetas que consideres y, cuando esté lista, priorizas aquellas que clasifiques como “urgentes-importantes” y dejas para el final de tu jornada las que consideres “no urgentes-no importantes”. 

 

Esto parece algo de sentido común, pero muchas veces empezamos nuestra jornada laboral por lo que nos da menos pereza dejando el melón para el final, y esto puede crear más ansiedad de la necesaria, lo que afecta también a la calidad del trabajo.  

Captura de pantalla del calendario de Google en el que se ve la mitad de la semana organizada en bloques de colores diferentes con diversas tareas (desayuno, llamadas, etcétera.)

Si eres más de agenda o calendarios, usa la técnica time blocking

El time blocking es una técnica de gestión del tiempo que se basa en dividir semanalmente tu jornada en bloques de tiempo con tareas específicas con la ayuda de tu agenda o calendarios en línea como el de Google que, además, te notificará cada vez que tengas que cambiar de tarea. Esta técnica es bastante sencilla y puedes complementarla con la matriz de Eisenhower y así organizar tu día o semana más eficientemente. Lo único que tienes que hacer es hacer un listado de tus tareas y, a principios de semana (o a finales de la anterior), organizar tu calendario con esos bloques de tareas. 

 

Si has cronometrado anteriormente tus tiempos, sabrás mejor cuánto tendrás que definir para cada tarea, pero, si no lo has hecho, puedes poner un tiempo aproximado la primera semana y ajustarlo la siguiente.

Captura de pantalla de ClickUp con las tareas terminadas y pendientes de Rocío.

Herramientas de gestión de proyectos 

Seguro que te suenan Trello, ClickUp o Asana, y con razón. Estas herramientas de gestión de proyectos pueden ayudarte muchísimo a ser más productiva, y algunas de ellas, además de servir como gestores de tareas, también cuentan con sistemas de time tracking, así que son la solución más completa para la gestión eficaz del tiempo. Obviamente, al principio te costará un poco acostumbrarte a crear las tareas, cerrarlas cuando hayas acabado (aunque con el gusto que da, seguro que cerrarlas no se te olvida) y contabilizar el tiempo; pero cuando te acostumbres verás que tu gestión del tiempo en el trabajo mejorará muchísimo, ya que no tendrás olvidos, serás más consciente de lo que haces cada jornada y podrás beneficiarte de todo lo que hemos mencionado al principio del artículo.

Hombre delante de un ordenador. Está totalmente cubierto de post its amarillos (cara, brazos, pecho, todo).

Centraliza tus notas

La organización es muy importante para la gestión del tiempo y, por ello, es esencial que centralices tus notas en UN SOLO SITIO: nada de tener 35 post its pegados a la pantalla del ordenador, tres frases inteligibles en un bloc de notas y documentos sueltos en el escritorio de tu ordenador sin contexto alguno. Aplicaciones como Sticky Notes y Google Keep (que además te deja acceder a tus notas desde donde quieras) harán que no pierdas tanto tiempo buscando aquel glosario online que te encantó o esa plantilla que te creaste para enviar tu CV.